Carlos Vives y Claudia Elena Vásquez celebran los 10 años de Tras La Perla, la iniciativa social creada para fortalecer el desarrollo del territorio samario y del Caribe colombiano. La jornada que ha reunido en Santa Marta durante dos días, al equipo Tras La Perla, líderes samarios, gobierno local, prensa nacional y regional, estuvo dedicada a revisar los aprendizajes de una década de trabajo, presentar resultados y abrir una conversación franca sobre los retos estructurales del territorio.

Una década de trabajo

Durante el espacio, la iniciativa enfatiza que este aniversario no es solo una celebración, sino una invitación a pensar críticamente el país desde Santa Marta, una ciudad con una riqueza ambiental y cultural única, pero que enfrenta desafíos históricos que requieren coordinación multisectorial, participación ciudadana y visión de largo plazo.

“Al mirar atrás y contemplar el camino recorrido durante estos años, nos llena de esperanza ver cómo una idea sembrada en el amor por nuestra tierra ha florecido en proyectos que hoy transforman realidades en el territorio que me vio nacer”, expresa Carlos Vives, al referirse al trabajo de Tras La Perla en su primera década.

Durante estos 10 años, Tras La Perla ha movilizado:

●           Recursos propios: Cerca de “$5.000.000.000”

●           Recursos externos: Más de “$12.000.000.000”

●           Aliados articulados: “Más de 90 aliados”

(Entre ellos, BID, CAF–Banco de Desarrollo de América Latina, Demolab, The Reynolds Foundation, Coca Cola y Conservación Internacional.)

Estas cifras evidencian un proceso basado en cooperación, diseño participativo y articulación intersectorial.

Como lo expresó en su momento Sergio Díaz-Granados, Presidente Ejecutivo de CAF, al referirse al trabajo de la iniciativa: “Nos complace mucho asociarnos con ‘Tras La Perla’(…) para buscar una solución definitiva al problema de agua y saneamiento de los pueblos palafíticos en la Ciénaga Grande de Santa Marta”.

Santa Marta como espejo de los desafíos nacionales

Tras La Perla destaca que Santa Marta refleja muchos de los retos de los territorios del país: la relación entre ciudad y ecosistemas, las tensiones entre crecimiento urbano y disponibilidad de servicios públicos, la necesidad de fortalecer infraestructuras y las brechas educativas y culturales que requieren procesos sostenidos.

Desde la filantropía internacional, Tim Reynolds, Co-Founder de The Reynolds Foundation, ha destacado previamente: “El territorio por el que trabaja Tras La Perla es rico en cultura, lleno de colores y sonidos que se sienten, es un lugar que transmite altos valores espirituales”.

Más que señalar fallas, la iniciativa propone leer a Santa Marta como un territorio que ayuda a comprender la complejidad de Colombia, un lugar donde confluyen realidades urbanas, rurales, costeras y ecológicas que obligan a trabajar de manera coordinada, con rigor técnico y participación ciudadana.

“En Tras La Perla hemos aprendido que el verdadero desarrollo florece cuando escuchamos profundamente, cuando tejemos vínculos de confianza, cuando reconocemos en cada comunidad los saberes y capacidades que siempre han estado allí. Nuestra labor no es ‘llevar progreso’, sino acompañar procesos que nacen del territorio mismo”, resaltan Carlos y Claudia sobre los aprendizajes de estos 10 años.

Proyectos impulsados en el territorio

Al presentar los proyectos, Carlos Vives explica un principio clave: el desarrollo local es sostenible cuando se construye desde la identidad del territorio, reconociendo su historia, sus saberes y sus aspiraciones. Ese enfoque ha guiado el método de trabajo de Tras La Perla.

En análisis anteriores sobre la iniciativa, Ramiro López Ghio, Representante del BID en Colombia, afirmó:

“Su metodología se basa en el fortalecimiento de la identidad local en comunidades urbanas y rurales culturalmente diferenciadas como el barrio Pescaíto, pueblos indígenas de la Sierra Nevada y comunidades anfibias de los pueblos palafíticos, entre otros. El resultado de este trabajo ha sido la puesta en marcha de 58 proyectos y 40 programas, a través de 260 alianzas con entidades como el Inter-American Development Bank, que han beneficiado a más de 22.000 personas”.

20 proyectos a nivel regional : Incluyen iniciativas como:

●Hábitat Cumbiana en la Ciénaga Grande (infraestructura, agua y saneamiento básico).

●Articulaciones en la Sierra Nevada, orientadas a la comprensión y protección de un territorio estratégico y biodiverso.

En reflexiones previas sobre el valor cultural del territorio, el antropólogo Wade Davis señaló: “El río Magdalena está apareciendo en las conciencias, la memoria, las ideas, el corazón y el alma del pueblo colombiano. Carlos Vives me dijo: la cumbia es la madre de la música, pero la madre de la música es el río”.

Cerca de 20 proyectos a nivel ciudad

Incluyen apuestas como:

● Comunidad de Cambio por la Educación en Santa Marta.

●Programa de Becas escolares y para carreras profesionales, técnicas y tecnológicas.

● Ciclo Vital: educación integral en sexualidad y fertilidad.

● Marca ciudad conmemorativa por los 500 años de Santa Marta.

Carlos Vives destaca que la conmemoración de los 500 años fue una oportunidad para repensar la narrativa de la ciudad y fortalecer el sentido de pertenencia. De ahí, el lanzamiento de su reciente sencillo “500” junto a otros artistas samarios. Y aprovecha la oportunidad para entregar a la ciudad la identidad gráfica pensada para perdurar en la comunicación de la ciudad luego de los 500 años. Esta identidad podrá ser descargada a través del siguiente enlace, que contiene el respectivo manual de marca y una guía de uso:

Cerca de 40 proyectos a nivel de barrio

Destacan los procesos pedagógicos desarrollados en el barrio Pescaíto, que cuentan con dos infraestructuras sociales: La Casa de la Danza y La Casa de Los Pescaítos.

“Cada proyecto implementado, cada familia acompañada, cada niño que encuentra nuevas oportunidades, representa una semilla sembrada para ese futuro que soñamos. Una semilla que crecerá y dará frutos que trascenderán nuestras propias vidas”, afirma Claudia Elena Vásquez al referirse al valor del método de trabajo y del tejido con las comunidades.

De cara al futuro, Caroline Reynolds, Vice Chairwoman y Co-Founder de The Reynolds Foundation, expresó en una valoración previa sobre los proyectos de la iniciativa: “Definitivamente, queremos estar más involucrados a largo plazo”.

Una década de aprendizajes en el territorio

El encuentro cierra con un llamado a la acción colectiva. Tras La Perla reafirma que la transformación sostenible requiere articulación, escucha activa y procesos continuos. Después de la conmemoración de los 500 años de Santa Marta, la iniciativa continuará impulsando proyectos de educación, cultura, identidad y desarrollo económico, bajo un modelo que combina rigor técnico, participación ciudadana y visión de largo plazo.

Finalmente, Carlos Vives y Claudia Elena Vásquez recuerdan la pregunta que ha guiado estos 10 años:

¿Cómo construir las condiciones para que las personas del territorio puedan dirigir su propia vida, ejercer su autonomía y proyectar su futuro?

Una década de trabajo demuestra que la respuesta está en fortalecer capacidades, abrir conversaciones profundas y situar a las personas en el centro de las decisiones que las afectan.

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