«FRONTERA VERDE» EN EL LÍMITE DE LA MUERTE Y LA ESPERANZA.

“Mi sensación es que no tiene sentido hacer arte si no nos esforzamos por cuestionar los problemas reales, aquellos que son dolorosos y a veces insolubles, y que nos obligan a tomar decisiones difíciles”.

Palabras de la directora Agnieszka Holland
Premio Especial del Jurado en el Festival de Venecia, 2023
Nominada a mejor película en el Premios del Cine Europeo

Con una aceptación de la crítica internacional del 88%, además de 17 premios y 24 nominaciones, llega a Colombia FRONTERA VERDE, la impactante película que denuncia la crisis humanitaria que se vive en las puertas de la Unión Europea: Una familia siria que huye de la guerra y viaja con la esperanza de entrar a Suecia, queda atrapada, junto a otras centenas de refugiados, en la «zona de la muerte», un bosque entre Bielorusia y Polonia. Un drama desgarrador de la directora Agnieszka Holland (Europa, Europa), reconocida por sus contribuciones a la nueva ola del cine polaco y una de las más prominentes cineastas de este país. Distribuida por Cine Colombia, FRONTERA VERDE se estrena el jueves 16 de mayo en las principales salas del país.
Con guion escrito por Agnieszka Holland junto a Maciej Pisuk y Gabriela Lazarkiewicz, FRONTERA VERDE se enmarca en el género de ficción para presentar historias reales que ella misma recogió entre los inmigrantes que viven a diario este conflicto en las fronteras. Con elementos que aluden al documental y narrada en varios idiomas, los mismos que construyen la Torre de Babel que se erige en el drama de esos corredores sembrados de injusticia y olvido, la película se teje a través de las historias de una familia de refugiados sirios, una profesora afgana y un guardia fronterizo, quienes dejan aflorar sus miedos, su humanidad, su resiliencia y esperanza. Una película valiente que es denuncia y alerta de los estragos del totalitarismo, y que durante su lanzamiento fue objeto de una campaña de odio impulsada por el partido
ultraconservador en Polonia, lo que obligó a rodear a la directora de un fuerte dispositivo de seguridad durante su campaña promocional.

FRONTERA VERDE cuenta con un elenco encabezado por comprometidos actores de distintas nacionalidades, en muchos casos exiliados por su activismo y denuncia de los problemas sociopolíticos de sus países, como Jalal Altawil (La Conspiration du Caire), Maja Ostaszewska (Schindler’s List; Time of Honor), Behi Djanati Atai (Under the Shadow), Tomasz Wlosok (Raven), Mohamad Al-Rashi (Cover Up), Dalia Naous (La fracture), Monika Frajczyk (Prime Time), Jazmina Polak (The Art of Loving) y Taim Ajjan.

El equipo técnico que sacó adelante el rodaje a pesar de condiciones adversas, está encabezado por el director de fotografía Tomasz Naumiuk, la directora de arte Katarzyna Jędrzejczyk, la diseñadora de vestuario Katarzyna Lewinska, el ingeniero de sonido Roman Dymny, la edición de Pavel Hrdlička y el compositor musical Frédéric Vercheval. Todos bajo la producción de Maria Blicharska-Lacroix y Damien Mc Donald.

En el verano de 2021, el dictador Alexander Lukashenko, presidente ininterrumpido de Bielorrusia desde 1994, trazó una nueva ruta migratoria que pasa por Minsk, la capital, a donde empiezan a llegar inmigrantes en avión procedentes de Oriente Medio. Estos últimos son conducidos luego a la frontera polaco-bielorrusa, 330 kilómetros más al oeste, y entran en Polonia, es decir, en la Unión Europea y en el espacio Schengen. Decenas de miles de ciudadanos iraquíes, afganos, libaneses, yemeníes, congoleños o somalíes, o de otros países de África y de Oriente Medio, obtienen de repente visados para Bielorrusia, se abren nuevas compañías aéreas que unen a veces directamente a Minsk y los contrabandistas organizan una verdadero “paquete” que incluye noches de hotel en Bielorrusia. Así llevó a cabo sus amenazas el sátrapa bielorruso, en represalia por las sanciones europeas impuestas tras el secuestro de un avión civil, que sobrevolaba el espacio aéreo bielorruso. A bordo iba un bloguero crítico con el régimen: Roman Protassevich, a quien Minsk se encargó de arrestar inmediatamente después del aterrizaje forzoso del avión en mayo de 2021 en suelo bielorruso. Lituania y luego Letonia, los otros dos países de la UE con los que Bielorrusia comparte frontera, también han experimentado una afluencia de inmigrantes en su frontera con Bielorrusia desde 2021. Resulta que estos dos países apoyan firmemente, todos como Polonia, la disidencia bielorrusa. Polonia, entonces gobernada por los conservadores nacionales del PiS (Ley y Justicia), elegidos en 2015, optó por la firmeza ante la llegada sin precedentes de estos inmigrantes, a los que consideraba otros tantos peones de la “guerra hídrida” de Lukashenko contra Polonia. Las autoridades polacas decidieron así legalizar las devoluciones, que practicarán casi sistemáticamente en esta frontera, incluso cuando la persona exprese su deseo de solicitar asilo en Polonia. Lo suficiente como para contravenir la Convención de Ginebra sobre asilo, de la que Polonia es signataria. El gobierno también decreta un estado de emergencia y una zona de exclusión en la frontera bielorrusa, entre septiembre de 2021 y julio de 2022, prohibiendo a los no residentes, incluidos periodistas y activistas, llevar ropa y asistencia a migrantes en peligro para que se dirijan directamente a la frontera. Es en esta realidad donde se ancla la película de Agnieszka Holland: vemos puestos de control que han marcado efectivamente esta zona, que en realidad se ha militarizado, mientras que la represión no ha hecho más que aumentar en el país tras las fraudulentas elecciones presidenciales del verano de 2020 y el levantamiento popular que provocaron.

Debido a la actitud de las autoridades polacas, por un lado, y bielorrusas, por otro, los candidatos al exilio se encuentran rápidamente atrapados en los espesos bosques de Podlaskie, una región rural del este de Polonia. A veces denuncian la violencia perpetrada por los guardias fronterizos, en particular los bielorrusos, y se encuentran deambulando durante días, empujados de regreso al bosque, privados de comida, agua, ropa seca, batería de su teléfono inteligente, medicinas… Las primeras muertes no. Tomar mucho tiempo. Tantas víctimas de intoxicaciones (por beber agua estancada), hipotermia, agotamiento, ahogamiento en ríos y pantanos o lesiones.

SINOPSIS

En los traicioneros y pantanosos bosques de la ‘Frontera Verde’ entre Bielorrusia y Polonia, los refugiados de Oriente Medio y África que intentan llegar a la Unión Europea se ven atrapados en una crisis humanitaria desencadenada por el presidente bielorruso Aleksandr Lukashenko. En este lugar, donde muchos migrantes utilizan la frontera como ‘puerta trasera’ para entrar ilegalmente a Europa, se entrecruza la vida de una familia de refugiados sirios, una solitaria profesora de inglés de Afganistán y un joven guardia fronterizo. Un drama desgarrador de la directora Agnieszka Holland, reconocida por sus contribuciones a la nueva ola del cine polaco y una de las más prominentes cineastas de este país. Frontera Verde recibió el Premio Especial del Jurado en el Festival de Venecia, 2023 y estuvo nominada a mejor película en el Premios del Cine Europeo, entre otros reconocimientos.

About The Author